Simbolismo Pinturas

El simbolismo, que surgió en la década de 1880, comenzó como respuesta a los cambios tecnológicos que se produjeron en el siglo XIX y al creciente materialismo de la gente. Con énfasis en una visión romántica de la imaginación, los simbolistas buscarían intuitivamente una visión interior, para representar sentimientos e ideas, en lugar de representar el mundo material. Estos artistas descartan la objetividad, así como las representaciones naturales y realistas en su arte, haciendo de este movimiento algo más que un cambio de estilo, sino un cambio de concepto artístico.

Los pintores desarrollaron una idea, propuesta por primera vez por Eugene Delacroix , de utilizar el color como elemento de expresión, no sólo de descripción. Esto significa que los simbolistas usarían colores fuertes, no necesariamente colores literales de las cosas, para simbolizar emociones y pensamientos. El término fue acuñado por el poeta y crítico de arte francés Jean Moréas en 1886. Escribe el Manifiesto del Simbolismo para la revista Le Figaro , explicando cómo estos artistas expresan sus emociones más profundas de forma sensorial.

Este grupo de artistas se sintió atraído por el folklore de los campesinos y su devoción religiosa. Experimentarían diferentes representaciones de sus recuerdos y sueños, mezclando el mundo real con la imaginación. Los artistas más importantes de este período fueron: Paul Gauguin , Emile Bernard y Paul Serusier . El cuadro La cosecha de trigo sarraceno de Bernard muestra su interés por el estilo de vida rural desligado del consumismo de la vida urbana. Pudo dar una vibra sobrenatural usando tonalidades rojas y naranjas.

Gauguin tiene una visión más abstracta en sus pinturas, ya que creía que el arte es un resumen de la naturaleza, interpretada por el artista y sus vivencias. Tras participar en las últimas seis exposiciones impresionistas , en 1886 decide trabajar en un estilo más individual, lo que le lleva a trabajar con el color de una forma totalmente diferente a la de sus colegas. Como muchos otros simbolistas, Gauguin despreciaba el materialismo y decidió abandonar el ahora corrupto París y trasladarse a un pequeño pueblo de Pont-Aveu. Defendía que la obra de un artista debería surgir más de la imaginación que de la mera observación, y daba más importancia a la reacción emocional que a la intelectual.

Este nuevo interés por el país único y la vida religiosa se mostró en Visión después del sermón: Jacob luchando con el ángel , una pintura simbólica y espiritual que muestra a las mujeres y su visión después de escuchar el discurso. Gauguin utiliza colores puros y planos con contornos negros, una composición dramática para crear una pintura que se destacó del resto de su época. Hay una clara separación en esta imagen, las mujeres en la parte inferior izquierda, que representan el mundo real, y las mujeres en la parte superior derecha, con colores intensos, que representan su imaginación. El uso de una composición inusual y amplias áreas de color puro están influenciados en parte por los grabados japoneses , algo que Gauguin aprendió en su visita a Vincent van Gogh .

Los simbolistas variarían en estilo en el sentido de que algunos artistas pintarían con pinceladas delicadas y tonalidades brillantes, mientras que otros incorporarían áreas significativas de color puro. Así como algunos trabajaron con más detalle, frente a representaciones crudamente simples y casi infantiles. Lo que estos artistas tenían en común era el sentimiento de impotencia, melancolía y desesperación que retrataban. Las imágenes eran intensas y a veces espirituales, y los temas normalmente tenían que ver con sueños, pesadillas, muerte y religión. Estas ideas se pueden ver en la pintura de Odilon Redon de una criatura verde que emerge de una serpiente gigante, llamada La Muerte Verde , una representación de ilusiones subconscientes, una anticipación de lo que más tarde fue parte del movimiento surrealista .

Pablo Picasso adopta el Simbolismo durante su formación, en una fase denominada Período Azul de Picasso, influenciada por el suicidio de un amigo. Una obra de arte famosa de este período es el viejo guitarrista de ensueño. Su guitarra es el único elemento que no representa tonalidades de azul. Picasso utiliza colores antinaturales para transmitir emociones. En 1893, Edvard Munch inició una serie de obras creadas para explorar los diferentes estados mentales y psicológicos, denominada El friso de la vida, que incluye el cuadro El grito . Esta misma pieza fue repetida muchas veces por Munch pero en diferentes medios, como litografía y pasteles. Otro artista que estuvo presente en el movimiento simbolista fue Gustav Klimt , quien conmocionó a la comunidad con Nuda Veritas y su simbolismo sexual. También pinta El árbol de la vida , una pieza más espiritual que tiene muchas interpretaciones, como la conexión entre el cielo y la tierra. Klimt también forma parte del movimiento Art Nouveau .